El 13 de octubre de 1909 en la prisión del pueblo de Montjuic, cerca de Barcelona, fue ejecutado Francisco Ferrer Guardia, luchador social y educador, acusado del ser el instigador de las protestas que tuvieron lugar en el mes de julio de ese mismo año en contra del embarque de tropas españolas hacia Marruecos. La ejecución fue efectuada después de un simulacro de Consejo de Guerra y de un proceso donde fue declarado culpable.
Este notable activista y educador fue autor del proyecto pedagógico “La Escuela Moderna” donde proponía conceptos educativos opuestos a los esquemas que prevalecían y eran aceptados en la sociedad española de aquella época. Su planteamiento simbolizó la oposición a los métodos educativos cuyo transfondo era el control social y político.
Francisco Ferrer Guardia fue originario de Alella, pueblo cercano a Barcelona donde nació el 10 de enero de 1859. Perteneció a una familia católica lo que motivó que se inclinara por un anticlericalismo que lo hizo resaltar en los círculos a los cuales pertenecía. Formó parte de la logia masónica Verdad de Barcelona. Desde joven Ferrer Guardia participó en actividades de educación popular y de manera autodidacta fue adentrándose en el ideario y las doctrinas internacionalistas. Cuando a partir de 1883 trabaja como ferrocarrilero se incorpora como activista republicano.
En 1886 apoyó un pronunciamiento militar que fracasó y cuyo objetivo era proclamar la Republica, por lo que tuvo que huir y exiliarse en París, donde permaneció hasta 1901.
Fue precisamente durante su estancia en París donde empezaría a generar los conceptos educativos que más tarde conformarían su proyecto “La Escuela Moderna”. Posteriormente ya de regreso a Barcelona y gracias a la ayuda de una exalumna, Ernestina Meunier llevó a la práctica su proyecto hasta que en 1906 a causa de que uno de sus traductores y bibliotecarios, Mateo Morral, se viera involucrado en el atentado contra Alfonso XIII tuvo la necesidad de cerrar La Escuela Moderna y sufrir varios meses de encarcelamiento.
Al ser liberado Francisco Ferrar Guardia se dirige a Francia y Bélgica en 1907 donde enseña español y ya involucrado en el activismo funda la Liga Internacional para la Educación Racional de la Infancia, que constituyó su plataforma educativa para darse a conocer en Europa e influir, incluso, en América y, concretamente, en México.
A su nuevo regreso a España y como secuela de su antigua vinculación con Mateo Morral es detenido en 1909 y sometido al Consejo de Guerra que ya mencionamos anteriormente.
La Escuela Moderna como institución se inauguró en agosto de 1902. El éxito de su propuesta educativa hizo que surgieran otros centros educativos similares en diferentes lugares de España. Estos centros educativos propiciaban una acción escolar que intentaba neutralizar la intención de la iglesia para controlar la educación pública, lo que le atrajo la simpatía y el apoyo de grupos populares y de obreros, sin que fueran precisamente anarquistas, de lo cual se acusaba a Ferrer Guardia.
Por otra parte, debido a la causa anterior la propuesta de una Escuela Moderna Racional de Ferrer Guardia fue apoyada por círculos burgueses republicanos, algunos radicalizados, que vieron con interés las innovaciones pedagógicas que el educador sustentaba y que estaba llevando con éxito desde Barcelona.
“La Escuela Moderna proponía, además, una educación basada metodológicamente en la ayuda mutua, en la solidaridad entre los hombres y la critica de las injusticias mediante el estudio de los mecanismos que las hacen posibles”.
La propuesta pedagógica de Ferrer Guardia se vincula a su evolución ideológica que pasó del republicanismo al anarquismo, manifestándose este último en la creación de células sindicalistas de solidaridad obrera y en su apoyo a huelgas, lo que ocasiono su influencia en grupo de trabajadores. Lo anterior lo lleva a fundar el periódico “La Huelga General”, donde a través de sus artículos y los de sus colaboradores pugna por un mejoramiento de la calidad de vida de los empleados de las grandes factorías que en esos momentos son explotados.
La lucha social y política de Ferrer Guardia y su propuesta pedagógica trascienden España y como ya lo mencionamos, llegan a nuestro país a principios del siglo pasado, llamando la atención de los educadores veracruzanos que estaban al día de los acontecimientos revolucionarios de otras latitudes y de las innovaciones que en el campo de la educación se ligaban a ellos.
Resulta interesante, en este marco, que en Xalapa se asignara el nombre del eminente educador español a una escuela primaria fundada en 1905 y ubicada precisamente en un barrio donde predominaban familias de trabajadores de la industria textil que laboraban en las fabricas de hilados y tejidos de El Dique y La Fama, donde hoy se ubican el parque infantil “Rafael Murillo Vidal” y La Casa de Artesanías y la Unidad de Artes de la Universidad Veracruzana, respectivamente.
Es obvio que quien dispuso que la escuela primaria “Francisco Ferrer Guardia” del barrio de El Dique, la cual cumplió hace unos cuantos días 100 años de fundada, estaba enterado de la vida y obra del educador español y de su fuerte vinculación con los grupos obreros y sus luchas reivindicatorias, similares a las que en esta ciudad y en aquella época realizaron los trabajadores que vivían en torno al plantel citado, además de las fábricas de San Bruno y de San Marcos (municipio de Xico) que conformaban la industria textil regional en la primera mitad del siglo pasado.
Este notable activista y educador fue autor del proyecto pedagógico “La Escuela Moderna” donde proponía conceptos educativos opuestos a los esquemas que prevalecían y eran aceptados en la sociedad española de aquella época. Su planteamiento simbolizó la oposición a los métodos educativos cuyo transfondo era el control social y político.
Francisco Ferrer Guardia fue originario de Alella, pueblo cercano a Barcelona donde nació el 10 de enero de 1859. Perteneció a una familia católica lo que motivó que se inclinara por un anticlericalismo que lo hizo resaltar en los círculos a los cuales pertenecía. Formó parte de la logia masónica Verdad de Barcelona. Desde joven Ferrer Guardia participó en actividades de educación popular y de manera autodidacta fue adentrándose en el ideario y las doctrinas internacionalistas. Cuando a partir de 1883 trabaja como ferrocarrilero se incorpora como activista republicano.
En 1886 apoyó un pronunciamiento militar que fracasó y cuyo objetivo era proclamar la Republica, por lo que tuvo que huir y exiliarse en París, donde permaneció hasta 1901.
Fue precisamente durante su estancia en París donde empezaría a generar los conceptos educativos que más tarde conformarían su proyecto “La Escuela Moderna”. Posteriormente ya de regreso a Barcelona y gracias a la ayuda de una exalumna, Ernestina Meunier llevó a la práctica su proyecto hasta que en 1906 a causa de que uno de sus traductores y bibliotecarios, Mateo Morral, se viera involucrado en el atentado contra Alfonso XIII tuvo la necesidad de cerrar La Escuela Moderna y sufrir varios meses de encarcelamiento.
Al ser liberado Francisco Ferrar Guardia se dirige a Francia y Bélgica en 1907 donde enseña español y ya involucrado en el activismo funda la Liga Internacional para la Educación Racional de la Infancia, que constituyó su plataforma educativa para darse a conocer en Europa e influir, incluso, en América y, concretamente, en México.
A su nuevo regreso a España y como secuela de su antigua vinculación con Mateo Morral es detenido en 1909 y sometido al Consejo de Guerra que ya mencionamos anteriormente.
La Escuela Moderna como institución se inauguró en agosto de 1902. El éxito de su propuesta educativa hizo que surgieran otros centros educativos similares en diferentes lugares de España. Estos centros educativos propiciaban una acción escolar que intentaba neutralizar la intención de la iglesia para controlar la educación pública, lo que le atrajo la simpatía y el apoyo de grupos populares y de obreros, sin que fueran precisamente anarquistas, de lo cual se acusaba a Ferrer Guardia.
Por otra parte, debido a la causa anterior la propuesta de una Escuela Moderna Racional de Ferrer Guardia fue apoyada por círculos burgueses republicanos, algunos radicalizados, que vieron con interés las innovaciones pedagógicas que el educador sustentaba y que estaba llevando con éxito desde Barcelona.
“La Escuela Moderna proponía, además, una educación basada metodológicamente en la ayuda mutua, en la solidaridad entre los hombres y la critica de las injusticias mediante el estudio de los mecanismos que las hacen posibles”.
La propuesta pedagógica de Ferrer Guardia se vincula a su evolución ideológica que pasó del republicanismo al anarquismo, manifestándose este último en la creación de células sindicalistas de solidaridad obrera y en su apoyo a huelgas, lo que ocasiono su influencia en grupo de trabajadores. Lo anterior lo lleva a fundar el periódico “La Huelga General”, donde a través de sus artículos y los de sus colaboradores pugna por un mejoramiento de la calidad de vida de los empleados de las grandes factorías que en esos momentos son explotados.
La lucha social y política de Ferrer Guardia y su propuesta pedagógica trascienden España y como ya lo mencionamos, llegan a nuestro país a principios del siglo pasado, llamando la atención de los educadores veracruzanos que estaban al día de los acontecimientos revolucionarios de otras latitudes y de las innovaciones que en el campo de la educación se ligaban a ellos.
Resulta interesante, en este marco, que en Xalapa se asignara el nombre del eminente educador español a una escuela primaria fundada en 1905 y ubicada precisamente en un barrio donde predominaban familias de trabajadores de la industria textil que laboraban en las fabricas de hilados y tejidos de El Dique y La Fama, donde hoy se ubican el parque infantil “Rafael Murillo Vidal” y La Casa de Artesanías y la Unidad de Artes de la Universidad Veracruzana, respectivamente.
Es obvio que quien dispuso que la escuela primaria “Francisco Ferrer Guardia” del barrio de El Dique, la cual cumplió hace unos cuantos días 100 años de fundada, estaba enterado de la vida y obra del educador español y de su fuerte vinculación con los grupos obreros y sus luchas reivindicatorias, similares a las que en esta ciudad y en aquella época realizaron los trabajadores que vivían en torno al plantel citado, además de las fábricas de San Bruno y de San Marcos (municipio de Xico) que conformaban la industria textil regional en la primera mitad del siglo pasado.
Podemos afirmar, sin duda alguna, que en la escuela primaria “Francisco Ferrer Guardia” ha sabido responder a los ideales del pedagogo y luchador social cuyo nombre lleva, formando a cientos de niños hijos de obreros textiles hasta la década de los sesenta en que son cerradas las fábricas de El Dique y La Fama y más tarde de otros grupos sociales, ampliando en la actualidad sus servicios a diferentes niveles educativos y modalidades.
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